viernes, 6 de julio de 2007

Transformers, la gran decepción cinematográfica del año

Ayer tuve el dudoso placer de ver lo que puede considerarse (y no exagero) una de las peores películas de la historia. Y es que, con la de pasta que Steven Spielberg (productor ejecutivo de la cinta) y Michael Bay (director), así como las tres productoras que participan en el proyecto (sí, tres), Universal, Dreamworks y Paramount, se han gastado, ya no sólo en hacer la película, sino en darle publicidad, el film es tan penoso que, de verdad, no vale la pena ni bajárselo de Internet para verlo en casa (yo, por desgracia, pagué).

Es una película tan mediocre en todos los sentidos, que, al llevar 15 minutos viéndola, yo y los amigos con los que fui ya estábamos deseando que se acabase y nos librasen de esa tortura (tortura que no es corta, ya que la película dura 2 horas y media).

Pero vamos por partes. La película empieza con una espectacular escena del ataque de uno de los robots malos a una base militar. Entonces pensamos todos “como sea así toda la peli, va a ser genial”. Craso error. Ese es, sin duda, el único momento en el que nos dio por pensar eso.

A partir de ahí se empiezan a suceder una serie de, llamémoslos así, desafortunados sucesos. Empezando por el guión… En serio, o empiezo a dudar de la integridad mental de quienes han sido capaz de llenar folios y folios con tamaña sarta de estupideces, o concluyo que no iban precisamente sobrios y serenos en horas de trabajo. Pues, y pese a que la idea argumental es buena, pasamos a tener una pseudocomedia patriotica de acción, a medio camino entre American Pie, los Power Rangers y Demolition Man, donde los chistes de un peculiar y casi indefinible humor se mezclan con escenas huecas y totalmente prescindibles y personajes, ya no sólo arquetípicos, sino caricaturescos… Además de contar con un desarrollo extremadamente lento. Vale que la historia no da para más, pero tardar una hora y cuarto en mostrar un poco de acción, táchenme de delicado, pero lo encuentro innecesario. Es que, para eso, que hubiesen hecho un corto de 30 min. (que es el metraje realmente “interesante” de la película) y nos hubiésemos ahorrado tiempo y disgustos.

Otro tema a tratar es la banda sonora, por llamarlo de algún modo, ya que, el compositor, más que componer, creo que se dedico a rebuscar en los archivos de las tres productoras de la película (ya que todas las canciones se parecían sospechosamente a otras de otras películas –espérate que no fuesen las mismas-) y fue tomando un fragmento de un tema y un fragmento de otro (eso, o abrió la biblioteca de audio de su PC y le dio a reproducción aleatoria) hasta llenar la película de fragmentos musicales totalmente inconexos entre si y absolutamente fuera de lugar (vamos, que ni una escena tenía bien puesta la música).

Sobre los actores, sólo diré que dejan que desear. Pero, como realmente esa película fuimos a verla para disfrutar de los efectos especiales en el cine y no para regodearnos con el drama, no importa mucho… Lo peor son los robots. Muy logrados digitalmente, pero bastante penosos en cuanto a personalidad se refiere (sobre todo, desde el momento en que empiezan a hablar).

Hablando de los efectos especiales, es lo único a destacar de la película. Realmente espectaculares (sobre todo al final). Aun así, su quizá no suficiente explotación (pues recordemos que este era el punto fuerte de la cinta) y su concentración en no más de dos escenas hacen que no sean capaz de salvar una cinta soporosa (más de uno de los que estábamos en la sala acabamos roncando…).

En definitiva, como ya he dicho antes, cuando fuimos a ver la película era para disfrutar de los efectos y ya sabíamos que el argumento dejaría que desear, pero nos encontramos que lo que dejaba que desear era la película en su conjunto. Sólo espero que la gente sepa darse cuenta y no vayan a verla (cosa difícil después de la expectación mediática que ha levantado su estreno) y que suponga el mayor fracaso de recaudación de las partes implicadas. Esa será mi venganza por haberme hecho perder dos horas y media de mi vida y mi dinero de esa forma.

Por cierto, una vez leída esta crítica, tened en cuenta que voy mal de tiempo y, por lo tanto, me he quedado corto con las descalificaciones. Podría llenar páginas y páginas hablando de este desastre.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

tu opinion la respeto, pero a mi si me gusto, saludos.

Anónimo dijo...

Para el anónimo, yo soy el verdadero anónimo.

Respecto a la película es bien mala... hasta decir basta. Ni la banda sonora es rescatable ya que ni se nota. Es como ir a ver un documental sobre como hacer efectos especiales y bromas malas. Lo de los perros dandose por el culo y el robot cojiéndose a Megan todavía no me lo creo.

Que raro a mi también a los 15 minutos estuve a punto de salirme del cine. Creo que por ahí debe ser la parte de la mamá que se droga y eso jaja malísimo.

No me salí pero porque me acordé que había pagado y si me salía no tendría con qué criticarla.

Creo que solo basta con adelantarse y ver las caras de las personas saliendo de la sala de cine. Nunca se van a comparar con la cara que tenían al salir de Transformers I. NUNCA